El gran mosaico de Medusa excavado en Huerta de Otero ha sido nominado por National Geographic en la categoría ‘Mejor Descubrimiento o Hallazgo Histórico Nacional’

El gran mosaico de Medusa excavado en Huerta de Otero ha sido nominado por National Geographic en la categoría ‘Mejor Descubrimiento o Hallazgo Histórico Nacional’

  • Como explica la prestigiosa publicación, estos premios de nueva creación “desean reconocer la divulgación y promoción de la historia, el patrimonio y la cultura”. En un escrito al alcalde de la ciudad, la revista muestra “nuestra más sincera enhorabuena y admiración por la labor que realizáis”
  • La lista completa con todos los nominados nacionales se publicará en la revista ‘Historia National Geographic’ del mes de septiembre
  • Para Félix Palma, director del Consorcio de la Ciudad Monumental, este yacimiento “es de un carácter excepcional por el nivel de conservación que tienen los restos y, sobre todo, por el aparato ornamental que decora la vivienda”

El hallazgo del Mosaico de Medusa en la domus de la Huerta de Otero, excavado por la Escuela Profesional Barraeca II del ayuntamiento de Mérida, ha sido nominado en la categoría ‘Mejor Descubrimiento o Hallazgo Histórico Nacional’ en los I Premios de los lectores +HISTORIA de la revista ‘Historia National Geographic’.

Como explica la prestigiosa publicación, estos premios de nueva creación “desean reconocer la divulgación y promoción de la historia, el patrimonio y la cultura”. En un escrito enviado por la entidad al alcalde de la ciudad, la revista muestra “nuestra más sincera enhorabuena y admiración por la labor que realizáis”.

La lista completa con todos los nominados se publicará en la revista ‘Historia National Geographic’ del mes de septiembre. La gente podrá votar por cada nominado del país a partir del 23 de agosto hasta el 10 de octubre de 2024. Los ganadores se darán a conocer en el número de diciembre de ‘Historia National Geographic’.

El hallazgo

Medusa y pavos reales; peces y motivos geométricos. Todo en un gran mosaico de teselas de colores. Este es el resultado de las últimas excavaciones en la Huerta de Otero que realizaron los alumnos y alumnas y trabajadores de la Escuela Profesional Barraeca II del Ayuntamiento.

“Estamos muy interesados en poner en valor nuevos yacimientos arqueológicos y de ahí que con la especialidad de operarios especializados en Patrimonio, Excavaciones Arqueológicas y Construcción de la Escuela Profesional Dual Barraeca II, que comenzó en septiembre del 2022o, se haya excavado en la Huerta de Otero con estos grandes resultados” subraya la delegada de formación y patrimonio arqueológico, Pilar Amor. Esta especialidad tiene una gran inserción laboral y el año pasado se logró que un 85% de los 15 alumnos participantes pudieran incorporarse a un empleo.

Para Félix Palma, director del Consorcio de la Ciudad Monumental, este yacimiento “es de un carácter excepcional por el nivel de conservación que tienen los restos y, sobre todo, por el aparato ornamental que decora la vivienda tan bien conservada: no solo el mosaico de la medusa sino también pinturas y motivos escultóricos”.

Además recuerda que “Huerta de Otero se comenzó a excavar en 1976 y en 2019 el Ayuntamiento, junto con el Consorcio y el Instituto de Arqueología, rescató de la memoria ese yacimiento; ahora el reto es ponerlo en valor y la gente pueda disfrutarlo”.

José Vargas, monitor de arqueología de la Escuela Profesional Barraeca II, señala que “en esta excavación se ha puesto a la luz una domus romana y de manera completa una de sus estancias principales, pavimentada por un mosaico policromo de unos 30 m2 cuyo motivo central está representado por la cabeza de una Medusa enmarcado en un medallón octogonal. Cuatro pavos reales, encarnando a las cuatro estaciones, se sitúan en las esquinas dentro de hexágonos”.

Toda ella queda enmarcada “en un gran cuadrado en el que se intercalan motivos florales y animales (aves y peces) junto a máscaras. La aparición de la imagen de la Medusa es típica en los pavimentos musivos del s. II d. C. como signo profiláctico o de protección de los habitantes de la domus”.

Los resultados arqueológicos de las diferentes intervenciones entre 2019 y 2023 han puesto a la luz un tramo de muralla fundacional romana de unos 40 metros de longitud y 2.70 metros de anchura: es aquí donde se conserva la altura máxima documentada hasta ahora en toda la cerca defensiva, de 5 metros de altura.

Adosada a la muralla por su cara interna se ha documentado los restos de una calzada que corre paralela a la muralla con una anchura de 6 metros. Esta vía quedará parcialmente amortizada en el siglo IV d. C. por la construcción de unas termas privadas.

EXCAVACIÓN ARQUEOLÓGICA EN HUERTA DE OTERO

La Huerta de Otero es una Zona Arqueológica situada en el lado occidental de la ciudad, delimitada por el dique de contención del río Ana y el muro sur de la alcazaba árabe. Se trata de un solar que fue objeto de excavaciones arqueológicas en 1976 como paso previo a su adquisición por parte de la Administración Central.

En dicha intervención se sacaron a la luz los restos de una domus romana y de un lienzo de la muralla de la ciudad. Tras décadas de abandono, a inicios de 2019, se comenzó un proyecto de investigación que tiene como objetivo la documentación integral del solar mediante excavaciones arqueológicas, prospecciones geofísicas y la adecuación a la visita pública de los restos exhumados. En este proyecto colaboran el Consorcio de la Ciudad Monumental, el Instituto de Arqueología y el Ayuntamiento, promotor del taller de Operarios especializados en Patrimonio, Excavaciones Arqueológicas y Construcción de la Escuelas Profesional Duales Medea, Barraeca I y Barraeca II.

Jueves del Museo – Museo Nacional de Arte Romano de Mérida

Jueves del Museo – Museo Nacional de Arte Romano de Mérida

Visitas guiadas a la exposición temporal “DOMUS ROMANA. Vida en doméstica en Augusta Emerita”

Los voluntarios culturales de la Asociación Amigos del Museo de Arte Romano de Mérida realizarán, un año más, unas visitas guiadas muy especiales a la exposición temporal del museo. Cada visita será diferente y se destacará una pieza determinada del recorrido.

Como novedad, este año, durante las visitas de julio contaremos con intérpretes de lengua de signos que podrán acompañar a la visita a personas con discapacidad auditiva que lo precisen.

Para más información   https://www.cultura.gob.es/mnromano/actividades/agenda/2024/jueves-museo.html

El yacimiento Tartésico de El Turuñuelo sigue ofreciendo nuevas sorpresas.

El yacimiento Tartésico de El Turuñuelo sigue ofreciendo nuevas sorpresas.

Descubren un abecedario de hace 2.500 años en una tablilla, los arqueólogos hallan 21 signos que podrían componer una especie de dialecto de los habitantes del edificio.

Investigadores del Instituto de Arqueología de Mérida (IAM), centro mixto del CSIC y la Junta de Extremadura) están estudiando una serie de signos inscritos en la tablilla de pizarra del yacimiento tartésico de Casas del Turuñuelo, (Guareña, Badajoz), cuyo hallazgo se anunció la semana pasada, y que, según las primeras interpretaciones, se trataría de un abecedario de una escritura paleohispánica meridional.

Los científicos del CSIC, organismo dependiente del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades (MICIU), responsables de los trabajos en el yacimiento, colaboran con un investigador experto en este tipo de escrituras tras identificar lo que parece ser una secuencia de 21 signos trazados en el marco de la tablilla en la que también se hallaron figuras de guerreros, como los propios investigadores presentaron en rueda de prensa el jueves pasado. Los expertos apuntan que sería el tercer abecedario de una escritura paleohispánica meridional.

Joan Ferrer i Jané, investigador adscrito al grupo LITTERA de la Universidad de Barcelona, conoció por los medios de comunicación el descubrimiento de una placa de pizarra con las siluetas de tres guerreros en el yacimiento de Badajoz. “Más allá de las figuras, cuando observé la placa vi que en uno de los laterales parecía haber un signo paleohispánico, un signo que no se puede confundir con ningún otro. También se apreciaban otros trazos compatibles con signos de una secuencia conocida”, explica. Ferrer se puso en contacto con el equipo del Instituto de Arqueología de Mérida, responsable de estas excavaciones arqueológicas, y les pidió fotografías macro parciales de la zona para poder corroborar sus sospechas. “Tras estudiar las imágenes todo apunta a que se trata de un abecedario de escritura meridional con la secuencia inicial ABeKaTuIKeLBaNS?ŚTaUE, que es casi la misma documentada en el abecedario de Espanca, excepto por el decimoprimer signo, que presenta una forma especial”, indica Ferrer i Jané.

El abecedario es una inscripción muy conservadora. De hecho, en la actualidad se mantiene en los abecedarios la secuencia inicial ABCD, que procede del fenicio. El encontrado en Guareña empieza con la secuencia “ABeKaTu”, que sería su equivalente, y contaría con 21 signos escritos en el sentido de izquierda a derecha siguiendo el borde exterior de la placa. “Se habrían perdido al menos 6 signos en la zona partida de la pieza, pero si fuera completamente simétrico y los signos ocuparan completamente tres de los cuatro laterales de la placa podría llegar a los 32 signos, con lo que los signos perdidos podrían llegar a ser once o quizás más si un posible signo, “Tu”, aislado en el cuarto lateral, formara parte del abecedario”, comenta Ferrer i Jané, que añade que “es una pena que se haya perdido la parte final del abecedario ya que es ahí donde suelen estar las diferencias más acusadas”.

Esther Rodríguez González, investigadora del CSIC y una de las responsables de las excavaciones arqueológicas en Casas del Turuñuelo, destaca que desde el primer momento del hallazgo de la tablilla de pizarra era consciente de que “el volumen de información que contenía era superior incluso al de los propios rostros encontrados [de los guerreros]”. Además de las siluetas de unas figuras humanas, los científicos ya habían observado varios círculos y líneas que hacían intuir que la placa se podría analizar a diferentes niveles.

En estos momentos, Esther Rodríguez y el resto de investigadores del IAM, junto a Joan Ferrer, se encuentran estudiando el alcance de los signos identificados y la importancia que pueden tener como muestras de escritura paleohispánica meridional.

Tres abecedarios

Las escrituras paleohispánicas se dividen en dos familias: la familia nororiental y la familia meridional. La frontera entre una y otra estaría, aproximadamente, al sur de Valencia. Todas ellas derivan de la escritura fenicia, de la que se hizo una primera adaptación a lo que se llama un signario paleohispánico original y luego se produjeron dos adaptaciones diferentes, una en el norte y otra en el sur. Esta última es la que dio lugar a la familia de las escrituras meridionales, a la que correspondería este abecedario.

Hasta el momento, solo hay constancia de la existencia de dos abecedarios más de escrituras meridionales. Según las primeras investigaciones, el abecedario del Turuñuelo repite, como mínimo, los 10 primeros signos del abecedario del yacimiento de Espanca, en Castro Verde (Portugal). “Este abecedario tiene 27 signos y es el único completo que conocíamos hasta la fecha. Se encontró otro en la excavación de Villasviejas del Tamuja (Cáceres) pero está muy fragmentado, solo tiene algunos signos centrales. Con lo cual el de Guareña sería el tercero y aportaría mucha información”, apunta Ferrer.

La colaboración entre los investigadores ayudará a determinar si el abecedario de Casas del Turuñuelo se puede clasificar con alguna de las escrituras ya conocidas o si debe considerarse una escritura meridional independiente. “En todo caso, confirma que en este yacimiento se ocultan aun muchas más inscripciones que esperamos que salgan a la luz en futuras campañas”